Cosechando la arquitectura: una mirada a tres materiales de origen vegetal.
Durante décadas, nuestra sociedad ha adoptado predominantemente un enfoque extractivista al formular modelos para la fabricación de materiales en diversas industrias. Si bien ahora sabemos que este modelo es insostenible, queda una pregunta importante: ¿cómo lo hacemos? Puede que todavía estemos lejos de ofrecer una respuesta definitiva a este desafío, pero aún así, es emocionante observar que, en un contexto marcado por un horizonte global y ecológico desafiantela comunidad arquitectónica mantiene un enfoque positivo al presionar por una reevaluación de lo que hacemos y cómo lo hacemos.
Este impulso puede estar ganando relevancia debido al surgimiento de generaciones más conscientes en relación al medio ambiente, como la Generación Z y Alfa. Lo cierto es que estamos asistiendo al desarrollo de nuevas filosofías de producción, como la de materiales de origen vegetal, que adoptan prácticas encaminadas a favorecer el uso de recursos derivados de las plantas, reducir la dependencia de procesos extractivos y promover alternativas conscientes y sostenibles en diversos aspectos de la fabricación y producción de materiales en la arquitectura.
Una destacada de los materiales de origen vegetal reside en la diversidad de oportunidades para su desarrollo, lo que refleja la variedad que se observa en la naturaleza entre las distintas especies. En este contexto, vale la pena subrayar que una cantidad importante de la materia prima utilizada normalmente se clasificaría como residuo si no se utilizara. Así, asistimos al desarrollo de materiales innovadores que contribuyen a la descarbonización de nuestro entorno, aprovechando recursos subexplorados que de otro modo podrían considerarse desperdicio.
En este contexto y para proporcionar una visión global, hemos seleccionado cuidadosamente ejemplos de materiales de origen vegetal que resaltan su potencial, escalabilidad y diversas aplicaciones dentro del campo de la arquitectura. Además, hemos obtenido valiosos conocimientos de expertos que participan activamente en el desarrollo de algunas de estas innovaciones.
Paneles de pared de paja
El sistema está formado por paneles con estructura de madera de doble montaje y relleno de paja homogéneo, que representa el 98% de su estructura. Notablemente, se destaca por la ausencia de pegamentos o químicos en su proceso de producción. En general, una de las principales ventajas de estos paneles de paja para paredes, desarrollados por EcoCoconradica en que la paja se obtiene como subproducto de la agricultura, lo que supone una alternativa rápidamente renovable frente a la madera.
Actualmente, los paneles de paja se emplean en la construcción de muros exteriores, ofreciendo adaptabilidad en un espectro de proyectos, que van desde residencias unifamiliares hasta estructuras de varios niveles, ya que este panel proporciona una estructura portátil con altos niveles de aislamiento. La versatilidad del sistema es evidente en la incorporación de varios formatos de paneles diseñados para escenarios específicos, lo que permite cumplir con diversos requisitos estructurales y de diseño.
Al enfatizar la capacidad del panel para capturar carbono atmosférico, el equipo confía en que la construcción modular de paja desempeñará un papel importante en la transición hacia materiales que se alinean con las necesidades ambientales. El equipo afirma que «la clave para crecer es la automatización», buscando reducir la distancia de transporte y adoptar la producción local utilizando recursos locales. Además, para mantener su competitividad en países altamente desarrollados, enfatizan en la necesidad de centros de producción pequeños, ágiles y altamente automatizados, un concepto que llevan desarrollados desde 2019.
Hormigón Biorreceptivo
Se trata de un tipo de hormigón con una porosidad superior a la media, creado con un 90-95% de hormigón reciclado y cubierto con un revestimiento de paredes de musgo. Según respiro, que inició la investigación sobre este material hace 18 años, el revestimiento contiene nutrientes, agua y esporas de musgo que se rocían sobre la superficie del hormigón. Destacan que este método de fumigación acelera procesos que “de otro modo ocurrirían por instinto de la naturaleza”. Esto da como resultado un material que aporta beneficios como la conversión de gases de efecto invernadero, la promoción de la biodiversidad, la reducción del efecto de isla de calor y la sostenibilidad.
Para lograr escalabilidad, el equipo cuenta con un vivero eficiente que suministra musgo para proyectos de hasta 37.500 m² cada 12 semanas. Al subcontratar la producción de hormigón y colaborar con socios a gran escala, pueden operar de forma rápida y eficiente, centrándose al mismo tiempo en el cultivo de musgo. Destacan que el principal reto reside en mejorar la autosuficiencia del revestimiento para evitar tareas intensivas de gestión de proyectos.
En general, Respyre prevé que su investigación podría allanar el camino para estructuras autónomas en el futuro, permitiendo la integración perfecta de entornos naturales dentro de las áreas urbanas. Esta transformación, haciendo accesible el entorno natural en nuestras ciudades, beneficiaría nuestra salud y la del planeta. Esta accesibilidad contribuye a un futuro sostenible al remodelar nuestra percepción de la construcción, convirtiéndola en un fenómeno natural en lugar de una molestia humana.
Paneles de césped perenne de rápido crecimiento
Basado en solo dos recursos: pasto y resina sin formaldehído, planta d ha creado una alternativa a los Paneles de fibra orientada (OSB), eliminando la “necesidad” de talar árboles. La base de este material radica en abordar el calentamiento global capturando eficientemente el exceso de dióxido de carbono en la atmósfera. Esto se logra cultivando una hierba perenne de rápido crecimiento y mejorando el proceso de producción para convertirla en un panel de origen vegetal adecuado para revestimientos de paredes y techos.
Para el equipo y con respecto a la escalabilidad, “establecer una nueva cadena de suministro agrícola y diseñar y construir equipos de fabricación patentados es un desafío característico”, por lo que el enfoque principal radica en completar una línea de producción 100% eléctrica, modular y continua. Desde su fundación en 2021, han reunido un equipo de científicos, ingenieros, agricultores, técnicos y narradores que se han unido para reducir las emisiones de carbono en el entorno construido.
Como afirma Plantd y considerando la urgencia de la crisis climática, “es fundamental centrado en disminuir las emisiones de carbono incorporadas en todos los nuevos proyectos de construcción”. Como tal, la solución de paneles de césped y la producción de materiales con emisiones de carbono negativas contribuyen a reducir las emisiones de carbono incorporadas en el entorno construido. A gran escala, estos materiales con emisiones de carbono negativas pueden transformar los edificios de un problema de calentamiento global a una solución.
Aunque la mayoría de los materiales de construcción en arquitectura están asociados con procesos que dejan una huella de carbono discernible, cada innovación en materiales de origen vegetal ofrece nuevas posibilidades para la reutilización de materiales y la descarbonización del entorno construido. En el futuro, es probable que seamos testigos de la evolución e integración de estos enfoques en nuevas construcciones, dando lugar a propuestas constructivas innovadoras y estéticamente distintas que, en lugar de operar en el paisaje, se mimetizan con él. Estos materiales podrían servir de base para una generación comprometida con la construcción de una arquitectura más consciente tanto de lo que construye como de cómo lo construye.
Otro: Tovar, Enrique. «Cosechando la arquitectura: una mirada a tres materiales de origen vegetal» [Harvesting Architecture: A Glimpse Into 3 Plant-Based Materials] 18 de marzo de 2024. ArchDaily en Español. (Trad. Iñiguez, Agustina) Accedido el .